Tras 33 años la poliomielitis reapareció en Brasil ¿Podrá atravesar los andes?
La poliomielitis, que afecta principalmente a los más jóvenes y cuyo contagio provoca severas consecuencias en la vida de quien la padece, está prácticamente erradicada en el mundo desde hace casi tres décadas. Sin embargo, las autoridades sanitarias de la región han advertido el riesgo de su reaparición.
Las autoridades de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) pidieron en febrero pasado a los países de las Américas redoblar esfuerzos para vacunar a los niños contra la poliomielitis. La alerta viene, luego de que se registrara que en 2020 la tasa de vacunación contra la poliomielitis con las tres dosis alcanzara el 82%, la más baja desde 1994.
En ese entonces, el director de Familia y Promoción de la Salud de la OPS, Andrés de Francisco, indicó que la "amenaza de la reintroducción de la poliomielitis en la región es real (...) No podemos retroceder. Evitar casos de polio depende de tener una población infantil altamente vacunada y una fuerte vigilancia de la enfermedad", añadió.
¿Qué es la polio?
La poliomielitis es una enfermedad altamente infecciosa causada por el virus de la polio o poliovirus que se transmite principalmente a través del contacto con heces infectadas y puede afectar al sistema nervioso, causando parálisis en las piernas o los brazos. Antes de que la vacuna estuviera generalizada, casi 6 mil niños quedaron con parálisis en la región, hasta 1975.
Saltan las alarmas
Las autoridades de Brasil confirmaron un contagio de polio en un niño de tres años que vive en el estado de Pará. Las autoridades sanitarias de dicho país reportaron que su tasa de vacunación en menores era muy baja: el 52% de los niños y niñas de entre dos y seis meses habían sido vacunados.
A mediados de agosto, las autoridades sanitarias de Nueva York advirtieron que esta enfermedad contagiosa había reaparecido. En julio, se registró el primer caso comprobado en el condado de Rockland. Se trató de un joven que debido a la polio ha quedado en estado paralítico.
En Rockland, solo el 60% de los niños de dos años están vacunados. Los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades (CDC) se dijeron "preocupados" y enviaron expertos para mejorar la detección y la vacunación. Dijeron que se trata de una enfermedad que puede tener "consecuencias devastadoras e irreversibles".
¿Y el Perú?
El pasado agosto, el ministro de Salud Jorge López encabezó una conmemoración por los 31 años sin nuevos casos de poliomielitis en el Perú. Esta conmemoración, sin embargo, no anticipó lo que vendría: una advertencia de la propia OPS que señalaba que el Perú, junto con Brasil y República Dominicana son los países que “corrían un riesgo muy elevado de reaparición de polio”, ya que la tasa de inmunización se había derrumbado luego de la pandemia de COVID 19..
El exministro de Salud Víctor Zamora explicó que no ha habido polio en las Américas por dos herramientas muy poderosas: la vacunación y la vigilancia epidemiológica. Respecto a esto último, Zamora expresó que los sistemas de vigilancia deben estar atentos, cuando se registran niños con situaciones de parálisis. “Cualquier médico tiene que estar alerta si es que, dentro de los niños de su comunidad, algunos reportan parálisis. ¿Para qué? Para tomar una muestra y descartar polio. Puede ser otra cosa, pero hay que descartar que no sea polio”, dijo a La Factoría.
El médico dijo que los casos de parálisis flácida se presentan en un rango de 1 por cada 100 mil. “Los sistemas de salud deben reportar siempre una parálisis flácida por cada 100 mil niños. No quiere decir que sea polio, pero te revela que los sistemas de salud están vigilando”, indicó.
Idealmente las coberturas de vacunación deben ser superiores al 95% de los niños en cada municipio y lo aceptable es que se sitúe en el 80%, expresó Zamora. “En el Perú se está reportando menos del 80%, pero no solo desde la pandemia, sino desde antes. El Perú no está llegando ni al mínimo”, dijo.
“En el Perú, la vigilancia epidemiológica es menor a 1. Es 0.75. Quiere decir que nuestros médicos y enfermeras no están diagnosticando parálisis flácida. Si no están diagnosticando, los casos se nos están pasando”, manifestó.
Zamora estimó que hay nuevas generaciones de profesionales de la salud que no han visto casos de polio, por lo que es necesario un masivo entrenamiento para que aprendan a reconocerlo.
“A un médico se le acerca una persona y reporta que su niño no puede caminar o no mueve los brazos. El médico o la enfermera que recibe este reporte tiene que hacer tres cosas: primero, verificar que es parálisis flácida; dos, reportar al sistema de vigilancia que he encontrado una parálisis flácida, y tres, tomar una muestra de heces y enviarla al laboratorio. Todo eso debe hacer el médico o la enfermera si sospecha de polio, pero alguien le tiene que enseñar o hacerle recordar. Pero como hace más de 30 años no hay polio, ahora se enseña COVID-19, diabetes, hipertensión, polio ya no. Hay que hacer una campaña masiva de entrenamiento”, indicó.
En comunicación con Salgalú Tv el Dr. Oscar Ugarte, también ex ministro de salud, expresó su preocupación por la baja vacunación.