Los ‘baños neutros’ pusieron en evidencia al sector antiderechos del Congreso
Por 24 horas, el Perú casi se queda sin la realización de la asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Lima. En la noche del jueves, el Pleno rechazó la autorización que debía dar. Fueron 55 votos en contra, 44 a favor y 16 abstenciones. ¿La razón? Según el presidente de la comisión de Relaciones Exteriores, Ernesto Bastamente, el documento incluía que el Gobierno debía proporcionar “un baño neutro”.
La legisladora Susel Paredes afirmó en Twitter que "la intolerancia sigue primando en el Congreso" peruano y consideró "un absurdo" la decisión del pleno. "Se rechazó el acuerdo que nos convertía en anfitriones de las sesiones de la OEA. ¿La razón? la negativa de habilitar un BAÑO NEUTRO para acoger visitantes de cualquiera de las identidades sexuales existentes. Un BAÑO por el cual, el Congreso, metía todas sus narices en competencias que no eran las suyas en la medida que la política exterior peruana está en manos del Presidente de la República. Un despropósito.
Luego de la ola de críticas, el Pleno reconsideró su votación y aprobó la Asamblea, aunque “con reservas”. Fueron 100 votos a favor, 7 en contra y 7 abstenciones. Reservas que son anécdotas y que pintan de cuerpo entero a este Parlamento ultramontano.
Baños neutros
Raúl Rosales, especialista en temas de género, explicó que al contar con baños neutros se busca cuestionar el sistema de género patriarcal, porque este sistema “es binario”. “El valor de un baño neutro es simbólico, cuestiona este sistema y al cuestionar el sistema simbólicamente conlleva a la reflexión”, manifestó a La Factoría.
Santiago Balvín, bachiller en arquitectura de la Universidad Nacional de Ingeniería y activista transmasculine no binarie, contó que la implementación de baños neutros o no binarios en las asambleas de la OEA responde a una problemática que se registraba y que no encontraba solución: ataques hacia personas trans o no binaries.
“En anteriores asambleas de la OEA han habido sucesos de violencia dentro de los espacios y mayormente en baños, porque no solo asisten asociaciones de sociedad civil LGTBI, también van organizaciones de la sociedad antiderechos”, afirmó.
“Por ejemplo, había personas antiderechos que seguían a personas trans a los baños para no permitirles entrar a los baños con el género con el que se identificaban. [...] Al costado de compañeras trans, habían personas antiderechos que le decían ‘que no eres mujer’. Son varias situaciones de violencia que han sucedido en anteriores asambleas de la OEA”, añadió Balvín.
Asimismo, recordó que en la Cumbre de las Américas realizada en el 2018 en Lima participó para hacer incidencia para la implementación de baños neutros en el Hotel Sheraton. “No fue una logística grande, solo fue poner una pegatina en los baños y que tengan seguridad para cuando una persona quiera entrar al baño con el género con el que se identifica, no tenga que ser puesta a situaciones de violencia”, manifestó.
Por ello, Balvín calificó de “sumamente transfóbica” la votación del jueves en el Congreso. “Siguen desprotegiendo a personas que nos identificamos de manera distinta al sexo y género asignados al nacer”, indicó.
Balvín reportó que personas trans padecen violencia en baños públicos, ya sea de universidades o de otro tipo de establecimiento. “Por ejemplo, si eres una persona trans femenina y quieres utilizar el baño de mujeres, pero tu imagen tiene rasgos masculinos, obviamente vas a sufrir violencia o vas a estar expuesta a violencia. Si te hacen ir al baño de hombres, peor, porque puedes salir golpeada. Esa no es una situación que es ajena a Perú. Pasa bastante”, dijo.
Para Raúl Rosales, medidas como baños no binario es visto como “peligroso”, debido a que supuestamente sale de esa normalidad impuesta por el sistema patriarcal. “Lo que es necesario cambiar es la sociedad. Eso se cambia, a través de políticas públicas y la educación”, refirió.
El especialista calificó la primera votación del Congreso como un reflejo más de que hay sectores de derecha e izquierda muy conservadores, trasnochados y retrógrados. Se sumó a acciones antecesoras, como el archivo del proyecto de masculinidad igualitaria. “Es un oleaje antigénero”, sentenció.